La feria de las colectividades es un evento anual que se realiza
en Mar del Plata, antes se hacía en noviembre, pero ahora, aprovechan las
vacaciones de invierno y la gran afluencia de gente que viene a la
ciudad.
Es algo que me ENCANTA!!! Ya
que en una carpa se junta la cultura (los trajes típicos, los bailes,
canciones) y la comida de varias colectividades (esto es lo que más me
gusta).
OBVIAMENTE, estos lugares son
el paraíso y el infierno para mí, ya que hay muchas opciones de comida distribuida
en stands, donde los mismos integrantes de las colectividades cocinan y venden
sus platos típicos. En este caso había aproximadamente 15 colectividades
distintas.
Fui con mis padres y probamos exquisiteces
de varios lugares.
La primer parada fue en CHILE,
y mi padre compró una porción de GUATITAS, que es el guiso de mondongo nuestro,
muy sabroso, pero muy caliente, jajaja
Después pasamos por ALEMANIA,
donde pidió mi madre; ella eligió una WURST CON CHUCRUT, es una salchicha
gruesa del tamaño de un chorizo cortada en rebanada acompañado de chucrut y con
kétchup.
En PORTUGAL compramos las
entradas, PAN ACHORIZADO, un pan que antes de cocinarlo le meten pedazos de
chorizos, con lo cual queda todo el pan con gusto a chorizo; también unos
BOLINHOS que supuestamente eran de bacalao, pero no puedo definirlo, pero de lo
que sí estoy seguro es que estaba muy rico, y para terminar con Portugal compré unas ESPADINHAS, que eran empanaditas de carne.
Luego, pasamos por RUSIA por MI
COMIDA, jajaja!! Pedí una porción de VARENIKE que es una pasta rusa muy suave
rellena de ricota, cebolla y papa acompañada de una salsita de crema y panceta
muy buena y una porción de SALCHICHAS que estaban estofadas y venían,
OBVIAMENTE, con ensalada rusa. Pero con una curiosidad, la misma tenia pedacitos de
PEPINO.
Última parada, la región de
LAZIO, ITALIA, donde compramos unas BRUSCHETAS, que debía ser entrada, pero lo
comimos casi de postre. Las bruschetas estaban con MUCHO jamón crudo y cubitos
de tomate. El único postre lo pedimos acá, es más, fue mi padre y fue un
CANNOLI, re-relleno de crema pastelera con cerecitas en los extremos.
A mí personalmente me encantan
estos eventos, ya que no son cocineros profesionales, sino integrantes de las
comunidades, lo que hace que los platos tengan un sabor más casero y con las
recetas originales y no adaptaciones modernas.
FERIA DE LAS COLECTIVIDADES
Plaza San Martín
Vacaciones de invierno