Los miércoles tengo franco en el hotel, entonces, decidí hacerme
una escapada a la Feria del Libro, que hace mucho tiempo que no la visito.
Salí del trabajo y me fui directo
a la terminal. Como tenía una reserva en un restaurante de la zona del Tigre, elegí
un hotel cercano y cuando estoy llegando, justo a la vuelta, veo una
casona con una muy linda iluminación y que invitaba a entrar: VIVANCO, decía el
cartel en el frente, pero como ya tenía reserva, lo iba a dejar para otro
viaje, peeero....
Llego al restaurante en el que tenía
reserva y me lo encuentro cerrado, reviso mi celular y tenía un mensaje
diciendo que, por motivos externos se suspendió la fecha (y yo me había ido
desde mar del plata para conocerlos), Y ahora qué hago??? Primero busqué algún
restaurante por la zona, pero después descubrí que el destino existe, jajaja
(como dice un amigo de la familia) y el mío era ir a VIVANCO y para allá
fui.
Como les mencioné, el frente,
tanto de día, como de noche es deslumbrante, cuando uno entra se da cuenta del
lujo que debió ser en su época.
Inmediatamente se presenta
Claudia y me hace entrega de la carta y me trae la panera con el untable. En la
panera había de todo! grisines, tostaditas con aceite y provenzal,
pancitos y pan francés.
La carta no era demasiado
extensa, pero muy tentadora. Había sólo 5 entradas de las cuales elegí
una PROVOLETA con tomate, rúcula, aceitunas negras y aceite de oliva. Como
ustedes saben, me encanta el queso gratinado y quemadito, y si bien no estaba
muy gratinada, tenía una base MUY crocante.
Para comer, no sabía si carne,
pescado o pastas, pero aceptando la sugerencia de Claudia, opté por los
PANZOTTIS DE SALMÓN ROSADO con una salsa crema de langostinos. Honestamente,
las pastas negras rellenas de salmón las prefiero con SALMÓN AHUMADO, pero en
este caso, me gustó, ya que estaban más equilibrados los sabores, fue un plato
suave, no hubo ningún ingrediente que invadiera a los demás, (aunque a mí me
encanta que el sabor del ajo, roquefort, salmón ahumado, dulce de leche en los
postres, entre otros, sea predominante).
Al postre no llegué, pero sí pedí
un café, que me sorprendió que vino solo, sin petit fours. Qué raro que con este
nivel no regalen nada con el café, pero nuevamente me taparon la boca en un
restaurante.
Cuando solicito la cuenta (que
no fue nada excesiva $600 con 2 gaseosas) me traen las encuestas de satisfacción
y un vale por un viaje a Uruguay, ADEMÁS una copa de espumante, y ADEMÁS un
colgante para llaves.
VIVANCO
Único y diferente
Mitre 74, tigre
4731 4042
info@vivancorestaurant.com.ar
http://www.vivancorestaurant.com.ar/
https://www.facebook.com/Restaurant.Vivanco/
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